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Andrea Fuentes quería observar, analizar, testar y buscar algo sólido más allá de los resultados en la primera etapa de la Copa del Mundo en París. A juzgar por la interpretación de los jueces, España empieza marcando el paso en esta estratégica ‘partida de ajedrez’ internacional del ciclo olímpico 2025-2028 con meta final en Los Ángeles (USA). Seis medallas, tres de ellas de oro, pero sobre todo buen material para seguir construyendo el edificio de la nueva natación artística española.

Las rutinas técnicas han sido el objetivo de la artística española, que sale este domingo como el país top del evento. Los oros de más valor han sido los de la rutina técnica de Equipo, tercio de la nota de la prueba olímpica, con el legendario ‘Everyboby’ de los Backstreet boys; y el del Dúo, con las jóvenes Txell Ferré y Lilou Lluís, que en 2024 ya fueron olímpicas, pero en Equipo.

A todo ello se suma el título en Solo Técnico de otra olímpica, potente y poderosa, como es Iris Tió, que ha trabajado también para el Equipo descartada su presencia en el Dúo que hacía con Alisa Ozhogina desde 2018.

Siguen los brotes verdes en las pruebas mixtas, donde España continúa siendo una gran superpotencia mundial de la mano de Anna Vega. Con Dennis González como primer ‘espada’ pero aún no en óptimas condiciones físicas (rascó bronce en Dúo Mixto Técnico con Sara Saldaña), ha surgido en los dos últimos años un joven compañero que ha destacado sobremanera en París: Jordi Cáceres, bronce en Solo Técnico y plata en Dúo Mixto Técnico con otra nueva joya de la cantera de sincro ESP, Aurora Lázaro. Ambos bailando en el agua el himno del Centenario del RC Celta de Vigo con la voz del inconfundible C. Tangana.

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