La llama olímpica ya luce en el pebetero del Estadio Nacional de Tokio. Los Juegos Olímpicos ya son una realidad. Tras un año de retraso, el emperador Naruhito ha declarado inaugurados los Juegos de la XXXII Olimpiada.

"Hoy es un día de esperanza, es muy diferente a lo que todos nos habíamos imaginado, pero estamos todos juntos", ha señalado el presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach, en el Estadio Nacional de Tokio, donde se ha celebrado la ceremonia inaugural.

Con un show más austero y sobrio que en ediciones pasadas, el Comité Organizador de los Juegos dedicó la ceremonia a todas las víctimas de la pandemia de coronavirus. "Siempre estarán en nuestros corazones", ha expresado el maestro de ceremonias por los altavoces en los minutos iniciales.

Después de un espectáculo de luces y fuegos artificiales, varias leyendas del deporte japonés introdujeron la bandera del país anfitrión en el estadio y la izaron en el mástil en el que permanecerá ondeando hasta que terminen los Juegos.

Las delegaciones de los 206 países desfilaron después uno a uno. Empezó Grecia, cuna de los Juegos Olímpicos, y concluyó Japón, el país anfitrión. España, con Saúl Craviotto y Mireia Belmonte como abanderados, salió en el puesto 88.

Tras el desfile, el show continuó y varios artistas internacionales cantaron el Imagine de John Lennon de forma virtual. Después, se izó la bandera olímpica y la tenista japonesa Naomi Osaka fue la encargada de encender el pebetero.

Los Juegos Olímpicos, donde compiten 322 atletas españoles, se celebrarán hasta el 8 de agosto, cuando se celebrará en este mismo escenario la ceremonia de clausura. Después, el fuego olímpico empezará el camino rumbo a los Juegos de París 2024.