NOTICIAS
La hora de la verdad de los Hispanos llegó. Con el Unity Arena de Oslo como escenario, el equipo de Jordi Ribera dio sus primeros pasos en este IHF Men’s Handball World Championship con la primera victoria de España. Un encuentro en el que la defensa española fue clave para frenar a una Chile que sorprendió al inicio.
DESDE LA DEFENSA CRECIÓ ESPAÑA
Chile entró al partido sin ningún tipo de complejo, siendo muy agresivos en ataque y sabiendo aguantar en defensa a nuestros Hispanos. Sin ir más lejos, los chilenos conseguían imponer su ley en los primeros compases del encuentro al medirse sin fallos con el 3:4 en los cinco minutos iniciales. El equipo de Aitor Etxaburu sabía castigar en las transiciones a España, sobre todo en manos de Rodrigo Aedo, y dejaba el partido para el equipo dirigido por Jordi Ribera con el claro aviso de que la defensa numantina debía aparecer mientras brillaba el 7:9 en el marcador tras diez minutos.
Imanol Garciandía aparecía a base de goles para aguantar la diferencia, pero ya había calado el mensaje de que el partido se ganaba desde la defensa. Chile pugnaba para que eso no pasara insistiendo en su filosofía de juego rápido desde la circulación, pero en cuanto España supo anticiparse, el equipo de Etxaburu fue diluyéndose con el paso de los minutos. El crecimiento se plasmaba en el paso del tiempo, con el 9:11 en el intervalo de la primera parte y el 12:11 un par de minutos después, confirmando la remontada. Esto, sumado a las pérdidas de la Selección chilena, propiciaron que el descanso se viese con mejor cara con el 13:11 a diez minutos de su llegada.
Felipe García, con seis paradas en apenas diez minutos, daba vida a su equipo para que la renta no fuese aún mayor. No obstante, la tendencia ya se había invertido, y los Hispanos habían puesto la directa. Se pasó del intercambio de goles a la brillantez bajo palos, y hasta en eso dominó una España que veía como Sergey Hernández se hacía gigante. Poco a poco fue aumentando una renta que se detuvo en el 17:13 con ambos combinados dirigiéndose al túnel de vestuarios.
SERGEY HERNÁNDEZ SE DOCTORA EN OSLO
Los Hispanos tenían que controlar la apuesta de Chile para buscar la remontada. Pese a sus intentos, España había fijado su listón e intensidad defensiva en el partido, y eso propiciaba muchos dolores de cabeza al combinado sudamericano. Como respuesta, la Selección chilena aumentó su fortaleza atrás para intentar complicar los ataques españoles, aunque con paupérrimo éxito tras caer los cinco goles de diferencia con el 22:17 tras diez minutos de segunda parte.
Chile se vio en inferioridad numérica cuando más necesitaba subir líneas para remontar, y se encontró con que España supo castigar esta situación. Manteniendo el estilo encontrado, la máxima ventaja en el marcador fue creciendo paulatinamente con el paso de los minutos. Por destacar, Alex Dujshebaev sigue demostrando por qué es uno de los mejores jugadores del mundo en su posición. Salió a pista en la segunda mitad y dio todo un clínic de balonmano ofensivo, demostrando que la calidad que atesora el jugador del Industria Kielce es un valor seguro para este equipo. El combinado nacional de Etxaburu, que llevaba diez goles en el minuto 11, se atascó hasta tal punto que sólo sumó ocho más mientras restaban diez minutos para la conclusión (26:18).
En un Campeonato del Mundo cada gol cuenta, y lo entendió Chile. No dejaron pasar la oportunidad y no se dejaron ir, apretando a España en los últimos compases y amagando con bajar la renta de los cinco goles. Pero hasta a eso se supo sobreponer una España que aplacó la revolución chilena, cedió los focos a un Sergey Hernández que siguió brillantísimo bajo palos, y supo cerrar la primera victoria del campeonato con el definitivo 31:22.
Primeros dos puntos para la Selección española en este IHF Men’s Handball World Championship 2025, y mirada ya puesta en los dos siguientes rivales: este sábado, la siempre incómoda Japón y su estilo de juego tan característico; y ya el lunes, el coco, una Suecia que amenaza con ser la gran rival.